REPSI -
Revista Ecuatoriana de Psicología
https://repsi.org
Volumen 6, Número 15,
mayo-agosto 2023
ISSN: 2661-670X
ISSN-L: 2661-670X
pp. 71 – 81
Ansiedad sobre la muerte en personas de tercera edad institucionalizados
y no institucionalizados
Anxiety about death in institutionalized and
non-institutionalized seniors
Ansiedade sobre a
morte em idosos institucionalizados e não institucionalizados
Guillermo
Augusto Ceballos Ospino
guillermoceballos@gmail.com
https://orcid.org/0000-0002-1568-7058
nicoleanayadm@unimagdalena.edu.co
https://orcid.org/0000-0003-3038-5362
Ubaldo Enrique Rodríguez de Ávila
rodriguez.ubaldo@gmail.com
https://orcid.org/0000-0001-5907-001X
Universidad del Magdalena. Santa Marta, Colombia
Recibido el 9 de marzo 2023 / Aceptado el 25 de abril
2023 / Publicado el 22 de mayo 2023
Escanea en tu dispositivo móvil o revisa este artículo en:
https://doi.org/10.33996/repsi.v6i15.90
RESUMEN
Durante los últimos
40 años, la sociedad occidental ha venido experimentando un avance más rápido
de las personas mayores de 65 años, por ello; el objetivo del estudio fue determinar
la diferencia existente en la ansiedad ante la muerte en adultos mayores
institucionalizados y no institucionalizados. Con una metodología empírico
analítico de corte transversal cuya muestra fue de 47 sujetos institucionalizados
y 53 no institucionalizados. Para analizar las diferencias existentes en la
ansiedad ante la muerte se halló que las puntuaciones en la Escala fueron más
elevadas en los adultos mayores “institucionalizados” que en los residentes de
la comunidad general (M = 8,85; DE = 5,20 frente a M = 6,44; DE = 4,88; t =
2,06; grados de libertad = 76; p = 0,04). De esta manera, se concluyó que la
diferencia existente en la Escala ansiedad ante la muerte en adultos mayores
institucionalizados y no institucionalizados fueron similares.
Palabras clave: Ansiedad ante la muerte; Institucionalizados; No
institucionalizados; Tercera edad
ABSTRACT
During the last 40 years, Western society has been experiencing a faster advance of people over 65 years of age, for this reason; the objective of the study was to determine the difference in anxiety about death in institutionalized and non-institutionalized older adults. With a cross-sectional analytical empirical methodology whose sample was 47 institutionalized subjects and 53 non-institutionalized. To analyze the existing differences in death anxiety, it was found that the scores on the Scale were higher in "institutionalized" older adults than in residents of the general community (M = 8.85; SD = 5.20 vs. a M = 6.44, SD = 4.88, t = 2.06, degrees of freedom = 76, p = 0.04). Thus, it was concluded that the difference in the Death Anxiety Scale in institutionalized and non-institutionalized older adults were similar.
Keywords: Anxiety before death; Institutionalized; Not institutionalized; Third age
RESUMO
Durante os últimos 40
anos, a sociedade ocidental tem experimentado um avanço mais rápido de pessoas
com mais de 65 anos de idade, por esse motivo; O objetivo do estudo foi
determinar a diferença na ansiedade sobre a morte em idosos institucionalizados
e não institucionalizados. Com uma metodologia empírica analítica transversal
cuja amostra foi de 47 sujeitos institucionalizados e 53 não
institucionalizados. Para analisar as diferenças existentes na ansiedade da
morte, verificou-se que os escores da Escala foram maiores em idosos
"institucionalizados" do que em residentes da comunidade geral (M = 8,85;
DP = 5,20 vs. a M = 6,44, DP = 4,88, t = 2,06, graus de liberdade = 76, p =
0,04). Assim, conclui-se que a diferença na Escala de Ansiedade da Morte em
idosos institucionalizados e não institucionalizados foi semelhante.
Palavras-chave: Ansiedade diante da morte; Institucionalizado; Não institucionalizado;
Terceira idade
INTRODUCCIÓN
Durante los últimos
40 años, la sociedad occidental viene experimentando un avance muy rápido de
las personas mayores de 65 años considerados como de la tercera edad (Eurostat,
2020). Indudablemente un factor de riesgo para la salud es la soledad y el
aislamiento social (Gené-Badia et al., 2022; Gené-Badia et al.,2016; Losada et
al., 2012; Luanaigh y Lawlor, 2008), de ahí que la salud física y mental se
asocia con distintitos niveles de ansiedad ante la muerte, como lo señalan
varios estudios (Fortner y Neimeyer, 1999; Holwerda et al., 2014; Moreno et
al., 2009; Neimeyer et al., 2004; Valtorta et al., 2016; Wu et al., 2002).
Está claro que las
personas de tercera edad que dejan su residencia habitual para ser
institucionalizados, lo hacen, entre otras causas por problemas de salud,
fallecimiento de su cuidador o por no ser posible que sus familiares restantes
lo puedan atender, lo cual ocasiona muchos cambios en su día habitual, tales
como, abandono del hogar, de sus familiares, amigos y de algunas o varias de
sus pertenencias, aunado al hecho de que deberán habituarse a nuevas normas que
regulan dichas instituciones. Perdiendo, además, ciertas libertades de las
cuales antes gozaban (Pinazo y Sánchez, 2005). Asimismo, autores como Mora et
al. (2004) y Sepúlveda et al., (2010) consideran que a pesar de que la
institucionalización de adultos mayores brinda apoyo, pero, al limitar su
autonomía se incrementa la insatisfacción con su vida lo cual puede llevar a la
aparición de alteraciones mentales y/o dolor por la separación de los seres con
quienes han convivido.
Es así como, en la
tercera edad, influye en su adaptación al proceso de envejecimiento, el que se
empiece a pensar en las experiencias de la muerte (Fortner y Neimeyer, 1999; Wu
et al., 2002). Por ello, Cicirelli (2006) manifiesta que, si bien la muerte es
algo que todos debemos enfrentar, cobra mayor importancia en la tercera edad.
Algunos autores, consideran la cultura que incide en el concepto de la muerte
al final de la vida, ésta se convierte en un detonante para el comportamiento y
actitudes de los adultos mayores (Alvarado et al., 1995; Fry y Debats, 2002).
De esta forma, la
ansiedad ante la muerte es una respuesta emocional (Limonero,1994). Aunado al
hecho que esta ansiedad va a servir a nivel motor, cognitivo y fisiológico como
un agente protector sobre riesgos al alertar a las personas sobre los peligros
que la misma conlleva (Echeburúa, 1993), para el mismo autor, esta ansiedad
podría convertirse en patológica si se llega a presentar ante cualquier
estimulo insignificante o de forma exagerada. Así mismo, Pichot et al., (1988) define
la ansiedad como un estado emocional negativo, ligado a un pensamiento
recurrente de abandono. Además, para Viguera (2005) el concepto de muerte en el
adulto mayor está determinado por algunos factores, tales como la soledad,
presenciar muertes cercanas, alejamiento de los hijos y demás seres queridos,
enfermedades, separaciones, jubilación y la forma como elabora sus duelos.
De esta manera,
asociar la tercera edad o vejez con la muerte implica algo de intranquilidad,
dado que por su edad se está más cerca de morir, lo cual produce el pensar si
se sufrirá, cuándo llegará o si existe una vida más allá de la muerte. Esta
situación permite tratar el tema que por cientos de años se ha considerado tabú
y se debe conocer las dudas, ansiedades y todo el proceso que se presenta (Mora-León
et al., 2020). Es por ello, que varios estudios demuestran la relación que
existe entre la ansiedad ante la muerte y variables como sexo, edad, el trabajo
o labor que realiza, nivel de escolaridad, religión, comportamiento suicida y
el estado de salud que se tenga (Tomás-Sábado y Gómez-Benito, 2003). Además,
algunos autores mencionan que el temor a morir es algo natural y universal, por
tanto, toda acción del ser humano la hace para evitar esta ansiedad de algo que
irremediablemente ha de llegar (Greenberg et al.,1997; Solomon et al., 2015).
La investigación
llevada a cabo por Yildiz y Berrin (2017) encontró una relación positiva entre
la ansiedad y la muerte. Con respecto a la relación existente entre la soledad
que representa el sentirse sin la familia en una institución y la muerte,
Pinson (2010) halló que la soledad repercute en la ansiedad ante la muerte en
personas de la tercera edad. En cuanto al género, los estudios de Abdel-Khalek
(2005); MacLeod et al., (2016) y Robath (2017) encontraron que las mujeres
manifiestan mayor ansiedad ante la muerte, con respecto a los hombres. No
obstante, la investigación efectuada por Assari y Lankarani (2016) contrario a
las anteriores, determinaron que no existe diferencia entre ser hombre o mujer sobre
la ansiedad ante la muerte. En cuanto al estado civil, se halló que las
personas de tercera edad que tenían sus cónyuges fallecidos presentaban mayor
ansiedad ante la muerte que quienes contaban con pareja (Ghufran y Ansari,
2008). Sin embargo, otra investigación demostró que los solteros presentan
mayores puntajes de ansiedad ante la muerte que los demás (MacLeod et al.,
2016).
De esta manera, es
importante resaltar que la medición de la ansiedad ante la muerte ha crecido
durante las últimas cinco décadas (Gala et al., 2002). En la actualidad, se
cuenta con varias escalas para cuantificar la AHM (Groebe et al., 2018) pero el
Inventario de Ansiedad hacia Muerte (IAM) es el único instrumento culturalmente
sensible, originalmente diseñado en español para cuantificar la misma (Tomás-Sábado
y Gómez-Benito, 2005). En este sentido, el IAM es una escala de 20 ítems con
respuesta dicotómica, divididos en cinco sub-escalas o dimensiones. La
consistencia interna para el total de 20 ítems fue 0,90 (alfa de Cronbach) en
diferentes profesiones, trabajadores, estudiantes y pensionados. Además, se
observó una alta validez de convergente con la Escala de Ansiedad hacia la
Muerte, con una correlación de Pearson de 0,79 y alta estabilidad a cuatro
semanas, con correlación de 0,94 (Tomás-Sábado y Gómez-Benito, 2005).
Es por ello, que se
presenta la necesidad de indagar más al respecto, por lo tanto, en el presente
estudio se pretende determinar la diferencia que existe con la ansiedad ante la
muerte en adultos mayores institucionalizados y no institucionalizados de la
ciudad de Santa Marta (Colombia).
MÉTODOS
La metodología de la
investigación estuvo centrada en un estudio empírico analítico de corte
transversal. Cuya población y muestra se conformó por 100 adultos mayores de 65
años, distribuidos en 47 institucionalizados en un centro de vida y 53 adultos
mayores no institucionalizados, de la ciudad de Santa Marta, Colombia, a
quienes se les solicitó la firma del Consentimiento Informado, luego de la
debida explicación de los objetivos del estudio y que participar en el mismo no
conllevaría a problemas de salud ni de otro tipo. En este orden de ideas, el
muestreo de todos los participantes fue de tipo no probabilístico, por
conveniencia.
En el caso de los
Institucionalizados se tomó en cuenta a los adultos mayores de 65 años que se
encontraban en el centro el día de la visita (autorizada por la directiva de
este) desde las 8 horas hasta 17 horas, donde se aplicó el instrumento de
medición. Mientras que a los no institucionalizados se les invitó a participar
en la investigación y quienes aceptaron participar, se surtió el mismo
procedimiento descrito anteriormente para la firma del consentimiento
informado. De esta forma, se tomaron como criterios de inclusión a los adultos
mayores de 65 años en buenas condiciones generales de salud y estado de
conciencia que permitieron responder el IAM. Y exclusión, a los adultos menores
de 65 años con malas condiciones de salud física y mental.
Además, los instrumentos
utilizado para la recolección de datos fueron la información sociodemográfica
básica y el Inventario de Ansiedad hacia Muerte (IAM). Cabe desatacar que el
IAM es un instrumento conformado por 20 ítems distribuidos en cinco dimensiones
o dominios: ansiedad de origen externo (ítems 1, 3, 10, 15 y 19), significado y
aceptación de la muerte (ítems 7, 9, 12, 14 y 18), pensamientos sobre la muerte
(ítems 4, 13, 17 y 20), vida después de la muerte (ítems 5, 11 y 16) y brevedad
de la vida (ítems 2, 6 y 8). Cada ítem ofrece dos opciones de respuesta, sí o
no. A cada respuesta afirmativa se le otorgó un punto, en consecuencia, las
puntuaciones posibles abarcan entre cero y veinte (Tomás-Sábado y Gómez-Benito,
2005). Adicional, para medir la confiabilidad del instrumento se utilizó el
alfa de Cronbach el cual fue de 0,87.
También, la
recolección de información estuvo dirigido por una estudiante de pregrado de psicología
que fue quien realizó la aplicación del IAM y otras complementarias, tales como
aspectos sociodemográficos y el examen mental abreviado para detectar el estado
cognitivo, previamente entrenada por los investigadores, para la aplicación del
cuestionario sin condicionar la respuesta de los adultos. Para ello, se solicitó
la participación de los adultos mayores que cumplían los criterios de inclusión,
donde se explicaron los objetivos, los riesgos posibles, y los beneficios para
la ciencia del estudio a quienes aceptaron participar. Asimismo, se les informó
la posibilidad de negarse a responder cualquier pregunta o retirarse por
completo del estudio sin que ello implique un señalamiento negativo o trato
discriminatorio posterior. No obstante, se motivó a completar la totalidad del
cuestionario. La aceptación de la participación se confirmó con la firma del
consentimiento informado.
Asimismo, para el
análisis estadístico, los datos se procesaron en el programa estadístico
IBM-SPSS 22.0 para Windows (IBM-SPSS (2019). Previamente, se depuraron los
datos para eliminar errores y enmendar omisiones. Para cada ítem se estableció
la frecuencia y porcentaje de cada respuesta. Se calculó media y desviación
estándar de la puntuación total, y se aplicó la prueba estadística de Studend
para conocer la diferencia de medias entre los grupos (Molina Arias et al., 2021).
Cabe resaltar, que el
estudio representó un riesgo mínimo para los participantes porque solo se
realizaron las entrevistas de forma individuales, y no incluyó intervención
alguna que pudiera afectar la salud física y/o emocional de los sujetos. De
esta forma, se siguió con los principios éticos, ya que los participantes
firmaron el consentimiento informado. Igualmente, se respetó la
confidencialidad de los sujetos. El estudio siguió los lineamientos de la
Resolución 8430 del 1993 del Ministerio de Salud para la investigación con
humanos (Resolución 008430 de 1993).
RESULTADOS Y
DISCUSIÓN
Partiendo de la aplicación
de los instrumentos para la recolección de datos, se demostró que la diferencia
existente en la Escala ansiedad ante la muerte en adultos mayores
institucionalizados y no institucionalizados de la ciudad de Santa Marta
(Colombia), fueron similares en los adultos mayores “institucionalizados” y en
los residentes en la comunidad general, después de ajustar por las puntuaciones
en el mini examen mental, escolaridad, dependencia financiera y estrato
socioeconómico (b = -0,08; IC95% -3,41-1,82; p=0,55).
Además, en las
puntuaciones de la Escala de Ansiedad sobre la Muerte (alfa de Cronbach de
0,87) se observaron entre 0 y 19 (M = 8,85; DE = 5,20), para adultos mayores
institucionalizados y para adultos mayores no institucionalizados la Escala de
Ansiedad sobre la Muerte (alfa de Cronbach de 0,88) se observaron entre 1 y 19
(M = 6,44; DE = 4,88).
Para analizar las
diferencias existentes en la ansiedad ante la muerte en adultos mayores
institucionalizados y no institucionalizados las puntuaciones en la Escala
fueron más elevadas en los adultos mayores “institucionalizados” que en los
residentes en la comunidad general (M = 8,85; DE = 5,20 frente a M = 6,44; DE =
4,88; t = 2,06; grados de libertad = 76; p = 0,04). Sin embargo, la diferencia
perdió significancia después de ajustar por las puntuaciones en el mini examen mental,
escolaridad, dependencia financiera y estrato socioeconómico (b = -0,08; IC95%
-3,41-1,82; p=0,55). Tal como se muestra en la Tabla 1.
Tabla 1. Comparaciones entre los participantes
institucionalizados y la comunidad general.
Variable |
Institucionalizados n (%) |
Comunidad general n (%) |
p |
Edad |
70,13 (5,58) * |
68,38 (4,54) * |
0,13 |
Género masculino |
27 (58,69) |
16 (50,00) |
0,45 |
Pareja estable |
20 (43,48) |
18 (56,25) |
0,27 |
Dependencia financiera |
31 (67,31) |
11 (34,37) |
0,01 |
Estrato bajo (1-3) |
45 (97,83) |
21 (65,53) |
0,01 |
Menos que bachiller |
40 (86,96) |
10 (31,25) |
0,01 |
Condición médica |
24 (75,00) |
33 (71,74) |
0,75 |
GDS-5 |
1,83 (1,32) * |
0,84 (1,35) * |
0,12 |
Mini mental |
27,37 (2,42) * |
28,84 (1,71) * |
0,01 |
* Media (Desviación
estándar).
Discusión
Teniendo en cuenta
los resultados obtenidos con la realización de la presente investigación, se
puede deducir que el miedo a morir está presente a lo largo de todas las etapas
del desarrollo del ser humano (Uribe et al., 2007). Sin embargo, los adultos
mayores son más propensos a desarrollar ansiedades hacia la muerte
Al inicio, se destaca
una diferencia entre la ansiedad hacia la muerte en adultos institucionalizados
y no institucionalizados (M = 8,85; DE = 5,20 frente a M = 6,44; DE = 4,88; t =
2,06; grados de libertad = 76; p = 0,04). Sin embargo, ésta significancia
pierde valor al ajustar los resultados del mini mental y variables como la
escolaridad, la dependencia financiera y el estrato socioeconómico (b = -0,08;
IC95% -3,41-1,82; p=0,55). Estos resultados corroborarían lo observado en su
estudio Uribe et al. (2007) sobre la no existencia de estudios que respalden la
asociación directa entre estas variables y la ansiedad hacia la muerte.
Sin embargo, sí existen
trabajos que respaldan que algunas creencias, ritos, y apegos pueden estar
relacionado con el estrato socioeconómico de la población, su nivel de
escolaridad y vida financiera (Uribe et al., 2007). Lo que se encuentra
relacionado con los planteamientos de Limonero (1997, p. 43) cuando destaca que
“lo que realmente influye de manera significativa sobre la ansiedad hacia la
muerte es la forma que cada individuo tiene para percibirla y afrontarla”;
estas formas, se construyen a partir de sus características personales y
experiencias lo largo de su vida (Uribe et al., 2007).
Ahora bien, aunque la
significancia de la institucionalidad perdió valor al ajustar las variables
antes mencionadas, es importante reafirmar que la institucionalización implica
sin duda una reubicación especialmente dura y difícil de abordar en los adultos
mayores (Orosco, 2015). Vivir sin un familiar o conocido que refuerce sus redes
de apoyo y el reconocimiento de su identidad personal implica: una reducción en
su autonomía y un desarraigo con su vida anterior (Herazo-Beltrán et al., 2017;
Salvarezza, 1998). Además, de potenciar la aparición de sentimientos de
soledad, que según los planteamientos de Sánchez y Shica (2019) es quien
dispara de forma significativa la ansiedad frente la muerte.
Seguido, no se
encontró diferencias significativas entre la condición de salud de los adultos
mayores institucionalizados y los que no lo están, en la aparición de la
ansiedad hacia la muerte, aspecto que se aleja de los planteamientos de Sánchez
y Shica (2019), quienes plantean que tener una mala salud para la edad sería un
factor que influye en el nivel de ansiedad frente a la muerte.
Con relación a la
ansiedad hacia la muerte, la edad y el estar institucionalizados o no estarlo,
es posible identificar que no existen diferencias significativas. Es decir,
cuando se abordan las variables intervenidas y “…se utilizan ancianos, lo más
probable es obtener una correlación negativa entre la edad y la ansiedad hacia
la muerte” (Tomás-Sábado y Gómez-Benito, 2003, p 261). Asimismo, varios autores
en sus investigaciones concluyeron que la diferencia de edad no se relaciona con
la ansiedad ante la muerte (Elkins y Fee, 1980; Robbins et al., 1992; Rodríguez
et al., 2007).
Así mismo, al
analizar la edad y su relación con la ansiedad hacia la muerte, el presente
estudio identificó que no existe diferencias significativas entre hombres y
mujeres, independiente a si se está o no institucionalizado, lo cual difiere
con lo hallado por otros autores, en la cual plantean de manera general que las
mujeres presentan mayor ansiedad hacia la muerte que los hombres (Limonero,
1997; Pollak, 1979; Poveda et al., 2000; Schumaker et al., 1991).
Por otra parte, a
pesar de las limitaciones de la investigación, como fueron el tipo de diseño
utilizado que no permitió establecer causa- efecto y el hecho de haber tenido
que utilizar como sujetos institucionalizados quienes están parcialmente y no
las 24 horas, lo cual puede haber sido un factor importante para los resultados
del estudio. Sí se debe tomar en cuenta las fortalezas de la investigación,
dado que recoge datos de la población de adulto mayor, la cual muy pocas veces
es tomada en cuenta para efectuar estudios de investigación (Ishii et al., 2021),
especialmente en el medio colombiano y ninguna, en la ciudad.
CONCLUSIONES
Partiendo del
propósito del estudio, se pudo evidenciar que no hubo diferencia significativa
en la ansiedad ante la muerte entre los adultos mayores “institucionalizados” y
en los residentes en la comunidad general, después de ajustar por las
puntuaciones en el mini examen mental, escolaridad, dependencia financiera y
estrato socioeconómico. Es por ello, que se reafirma la necesidad de crear estrategias
de intervención que permitan generar competencias de afrontamiento y
disminución de ansiedades en los adultos mayores.
Sin
embargo, se recomienda que futuros estudios se efectúen con adultos mayores
institucionalizadas durante las 24 horas del día y no por horas al día. Por
ende, las evidencias obtenidas en la investigación deben ser tomados con
cautela.
REFERENCIAS
Abdel-Khalek, A. M. (2005). Death obsession in
Arabic and Western countries. Psychological Reports, 97(1), 138-140. https://doi.org/10.2466/pr0.97.1.138-140
Alvarado, K. A., Templer, D. I., Bresler, C., y Thomas‐Dobson, S. (1995). The
relationship of religious variables to death depression and death anxiety.
Journal of clinical psychology, 51(2), 202-204. https://doi.org/10.1002/1097-4679(199503)51:2<202::AID-JCLP2270510209>3.0.CO;2-M
Assari, S., y Moghani
Lankarani, M. (2016). Race and gender differences in correlates of death anxiety among elderly
in the United States. Iranian
journal of psychiatry and behavioral sciences, 10(2). Doi: 10.17795/ijpbs-2024
Cicirelli, V. G. (2006). Fear
of death in mid-old age. Journal of Gerontology Series B: Psychological
Sciences and Social Sciences 61(2), 75–81. https://doi.org/10.1093/geronb/61.2.P75
Echeburúa, E. (1993).
Fobia social. Martínez Roca.
Elkins, G.R., y Fee, A.F.
(1980). Relationship of physical anxiety to death
Anxiety and ege. Journal of Genetic psychology, 137(1),
147-148. https://doi.org/10.1080/00221325.1980.10532811
Eurostat (2020). Las
previsiones demográficas de la Unión Europea revelan el aumento de la brecha
entre los jóvenes y los más mayores. https://ec.europa.eu/regional_policy/es/newsroom/panorama/2021/05/20-05-2021-eu-population-projections-reveal-growing-gaps-between-young-and-old
Duran-Badillo, T.,
Maldonado Vidales, M., Martínez Aguilar, M., Gutiérrez Sánchez, G, Ávila
Alpirez, H., y López Guevara, S. (2020). Miedo ante la muerte y calidad de vida
en adultos mayores. Enfermería Global,19(58), 287-304. Epub 18 de mayo de 2020.
https://doi.org/10.6018/eglobal.364291
Fortner, B. V., y Neimeyer, R. A. (1999). Death anxiety in older adults: A
quantitative review. Death Studies, 23(5), 387-411. https://doi.org/10.1080/074811899200920
Fry, P. S., y Debats, D. L. (2002). Self-efficacy
beliefs as predictors of loneliness and psychological distress in older adults.
International Journal of Aging & Human Development, 55(3), 233-269. https://doi.org/10.2190/KBVP-L2TE-2ERY-BH26
Gala, F.J., Lupiani,
M., Raja, R., Guillén, C., González, J.M., y Villaverde, M. (2002). Actitudes
psicológicas ante la muerte y el duelo: Una revisión conceptual. Cuadernos de
Medicina Forense, 30, 39-50.
http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1135-76062002000400004&lng=es&tlng=es
Gené-Badia, J.,
Comice, P., Belchín, A., Erdozain, M.Á., Cáliz, L., Torres, S., y Rodríguez, R.
(2022). Perfiles de soledad social y aislamiento en población urbana. Atención
Primaria, 52(4), 224-232. https://doi.org/10.1016/j.aprim.2018.09.012
Gené-Badia, J.,
Ruiz-Sánchez, M., Obiols-Masó, N., Oliveras- Puig, L., y Lagarda- Jiménez, E.
(2016). Aislamiento social y soledad: ¿qué podemos hacer los equipos de
atención primaria. Atención Primaria, 48, 604-609.
http://dx.doi.org/10.1016/j.aprim.2016.03.008
Ghufran, M., y
Ansari, S. (2008). Impact of
widowhood on religiosity and death anxiety among senior citizens. Journal of Indian Academy of Applied Psychology, 34(1), 175-180.
Greenberg, J.,
Solomon, S., y Pyszczynski, T. (1997). Terror
management theory of self-esteem and cultural worldviews: Empirical assessments
and conceptual refinements. Empirical assessments and
conceptual refinements. In Advances in experimental
social psychology (Vol. 29, pp. 61-139). Academic
Press. https://doi.org/10.1016/S0065-2601(08)60016-7
Groebe, B., Strupp,
J., Eisenmann, Y., Schmidt, H., Schlomann,
A., y Rietz, C. (2018). Measuring
attitudes towards the dying process: A systematic review of tools. Palliat Med., 32(4), 815-837. https://doi.org/10.1177/0269216317748889
Herazo-Beltrán, Y.,
Quintero-Cruz, M. V., Pinillos-Patiño, Y., García-Puello, F., Núñez-Bravo, N.,
y Suarez-Palacio, D. (2017). Calidad de vida, funcionalidad y condición física
en adultos mayores institucionalizados y no institucionalizados. Revista Latinoamericana
de Hipertensión, 12(5), 174-181. http://hdl.handle.net/20.500.12442/2454
Holwerda, T.J., Deeg,
D.J.H., Beekman, A.T.F., Van Tilburg, T.G., Stek, M.L., Jonker, C., y Schoevers,
R. (2014). Feelings of loneliness, but not social isolation,
predict dementia onset: Results from the Amsterdam Study of the Elderly
(AMSTEL). Journal Neurology Neurosurg Psychiatry,
85,135-142. http://dx.doi.org/10.1136/jnnp-2012-302755
IBM-SPSS (2019). Statistics
for Windows, version 25.0. Armonk: SPSS.
Ishii, Taira, I., y Mitsuo,
D. (2021). Satisfacción de vida y ansiedad ante la muerte en adultos mayores
nikkei. http://hdl.handle.net/10757/658669
Limonero, J. T.
(1994). Evaluación de aspectos perceptivos y emocionales en la proximidad de la
muerte. Tesis doctoral inédita. Facultat de Psicología. Universitat Autónoma de
Barcelona. https://hdl.handle.net/10803/5458
Limonero, J.T. (1997).
Ansiedad ante la Muerte. Ansiedad y estrés, 3(1), 37-46.
Losada A.,
Márquez-González, M., García-Ortíz, L., Gómez-Marcos, M.A., Fernández, V., y
Rodríguez-Sánchez, E. (2012). Loneliness and mental
health in a representative sample of community-dwelling Spanish older adults. Journal
Psychology., 146(3),277–292. https://doi.org/10.1080/00223980.2011.582523
Luanaigh, C.O., y Lawlor, B.A. (2008). Loneliness and the
health of older people. International Journal of Geriatric
Psychiatry, 23,1213–1221. https://doi.org/10.1002/gps.2054
MacLeod, R., Crandall,
J., Wilson, D., y Austin, P. (2016). Death anxiety among New Zealanders: The
predictive role of gender and marital status. Mental Health, Religion &
Culture, 19(4), 339–349. https://doi.org/10.1080/13674676.2016.1187590
Molina Arias, M., Ochoa Sangrador, C., y
Ortega Páez, E. (2021). Comparación de dos medias.
Pruebas de la t de Student. Evidencias en Pediatría,17
(1), 119-131.
Mora-León, A.,
Granados-Lozano, Y.I., y Tristancho-Mejía, M.Á. (2020). ¿Cuál es el significado
de la muerte que tienen las personas de la tercera edad del asilo de Emaús en
Medellín, desde una perspectiva Teológica? https://repositorio.uco.edu.co/handle/20.500.13064/717
Mora, M., Villalobos,
D., Araya, G., y Ozols, A. (2004). Perspectiva subjetiva de la calidad de vida
del adulto mayor, diferencias ligadas al género y a la práctica de la actividad
físico recreativa. MHSalud, Revista en Ciencias del Movimiento Humano y Salud,
1 (1), 1-12. https://doi.org/10.15359/mhs.1-1.3
Moreno, R. P., De La
Fuente Solana, E. I., Rico, M. A., y Fernández, L. M. (2009). Death anxiety in institutionalized and
non-institutionalized elderly people in Spain. Omega: Journal of Death and Dying, 58(1), 61-76. https://doi.org/10.2190/OM.58.1.d
Neimeyer, R., Wittkowski, J., y Moser, R. (2004). Psychological research
on death attitudes: An overview and evaluation. Death Studies, 28(4), 309-340. https://doi.org/10.1080/07481180490432324
Orosco, C. (2015).
Depresión y autoestima en adultos mayores institucionalizados y no institucionalizados
en la ciudad de Lima. Persona, (18), 91-104. https://doi.org/10.26439/persona2015.n018.500
Pichot, P., Widlocher, D., y Pull, C.B. (1988). Epidémiologie de l'anxiété en population générale. Communication au 4è Congrès de l'Association Européenne de Psychiatrie. Strasbourg, 20.10.1988
Pinson, W.M. (2010 Effect of loneliness on older
adults' death anxiety. University of North Texas.
Pollak, J.M.
(1979). Correlates of death anxiety: a review of empirical
studies. Omega: Journal of Death and Dying, 10(2), 97-121. https://doi.org/10.2190/4KG5-HBH0-NNME-DM58
Poveda, F., Royo, A., Aldemunde, C., Fuentes, R., Montesinos, C., Juan,
C., Ortola, P., y Oltra, J.A. (2000). Ansiedad hacia la muerte en atención
primaria: relación con la frecuencia y la psicomorbilidad de los consultantes. Atención Primaria,
26, 446-452. https://doi.org/10.1016/S0212-6567(00)78701-4
Robath, K. (2017). Determinants of existential death
anxiety: A cross-sectional survey study on the effect of age, gender, and
religious affiliation on death anxiety. Bachelor Thesis.
The Netherlands: University on Twente.
https://purl.utwente.nl/essays/72696
Robbins, J., Lloyd, C., Carpenter, S., y Bender, M.P. (1992). Staff
anxieties about death in residential Settings for elderly people. Journal of advance Nursing, 17, 548-553. https://doi.org/10.1111/j.1365-2648.1992.tb02831.x
Rodríguez, A. F. U., Valderrama, L., Vallejo,
D. M. D., Galeano-Monroy, C., Gamboa,
K., y Gómez, S. L. (2007). Diferencias evolutivas en
la actitud ante la muerte entre adultos jóvenes y adultos mayores. Acta
colombiana de psicología, 11(1), 119-126. https://actacolombianapsicologia.ucatolica.edu.co/article/view/322
Salvarezza, L. (1998): Psicogeriatria. Teoría y
clínica. Paidós.
Sánchez, B., y Shica, C. (2019). Depresión y ansiedad ante la muerte en
adultos mayores violentados de la ciudad de Trujillo. https://hdl.handle.net/20.500.12692/30346
Schumaker, J.F.,
Warren, W.G., y Groth, M.G. (1991). Death anxiety in Japan and Australia. Journal of Social
Psychology, 131(4), 511-518. https://doi.org/10.1080/00224545.1991.9713881
Solomon, S., Greenberg, J., y Pyszczynski,
T. (2015). The Worm at the Core: The Role of Death in Life. Random House.
Tomás-Sábado, J., y Gómez-Benito, J. (2003). Variables
relacionadas con la ansiedad ante la muerte. Revista de Psicología General y
Aplicada.,56,251-273.
Tomás-Sábado,
J., y Gómez-Benito, J. (2005). Construction and validation of the Death Anxiety
Inventory (DAI). European journal of psychological assessment, 21, 108-114. https://doi.org/10.1027/1015-5759.21.2.108
Uribe
Rodríguez, A. F., Valderrama Orbegozo,
L., y López, S. (2007). Actitud y miedo ante la
muerte en adultos mayores. Pensamiento Psicológico, 3(8), 109-120.
Valtorta, N.K., Kanaan, M., Gilbody, S., y Hanratty,
B. (2016). Lonelinnes, social isolation and social relationships: What are
we measuring? A novel framework for classifying and comparing
tools. BMJ Open 6, e010799. http://dx.doi.org/10.1136/bmjopen-2015-010799
Viguera, V. (2005).
Los miedos en los adultos mayores.
Wu, A., Tang, C., y Kwok, T. (2002). Death anxiety among Chinese elderly people in Hong Kong. Journal of Aging and Health, 14(1), 42-56. https://doi.org/10.1177/089826430201400103
Yildiz, M., y Berrin, M. (2017). The relashionships between
death anxiety and personality traits /Ölüm Kaygısı ile Kişilik
Özellikleri Arasındaki İlişkiler. Turkish Studies, 12(13), 659-676.
http://dx.doi.org/10.7827/TurkishStudies.12032