Horizontes. Revista de Investigación en Ciencias de la Educación
https://revistahorizontes.org
Volumen 7 / N° 28 / febrero
2023
Edición Extraordinaria
ISSN: 2616-7964
ISSN-L: 2616-7964
pp. 564 – 582
Concepto de buen profesor en sistemas presenciales y a
distancia. Análisis de grafos
Concept of a good teacher in
On-site and Distance Systems. Graph analysis
Conceito de um bom
professor em sistemas presenciais e à distância. Análise de rede
Emmanuel
Cristian Rosas Hernández
psic.emmanuelrosas@gmail.com
https://orcid.org/0000-0002-1729-8662
Hortensia Hickman Rodríguez
hortensia.hickman@iztacala.unam.mx
https://orcid.org/0000-0002-4025-9485
María
Leticia Bautista Díaz
psile_7@yahoo.com.mx
https://orcid.org/0000-0003-1154-1737
María
Luisa Cepeda Islas
mcepedaislas@gmail.com
https://orcid.org/0000-0001-9988-4202
Martha
Elba Alarcón Armendáriz
marthaaa@unam.mx
https://orcid.org/0000-0002-0158-4509
Facultad de Estudios Superiores-Iztacala,
UNAM. Ciudad de México, México
Artículo recibido el 23 de noviembre 2022 | Aceptado el
22 de diciembre 2022 | Publicado el 9 de febrero 2023
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https://doi.org/10.33996/revistahorizontes.v7i28.535
RESUMEN
El
objetivo del estudio fue comparar el significado otorgado de buen profesor por
profesores y estudiantes universitarios pertenecientes a sistemas presenciales
y a distancia. Se utilizó una muestra no probabilística y la técnica de redes
semánticas como instrumento de recolección de datos. Para analizar la
información, se emplearon métodos lineales y no lineales, basados en el
análisis de grafos. Se elaboraron tres categorías genéricas de análisis, para
ambos sistemas. Se encontró que los estudiantes y profesores de ambos sistemas
difieren en cuanto a la jerarquía de las categorías y su contenido. Los
estudiantes valoran los atributos personales sobre cualquier otra categoría,
independientemente del sistema; mientras que los profesores sí hubo diferencias
en el significado del constructo en función del sistema. Se señala la necesidad
de diseñar estrategias de enseñanza de acuerdo con el sistema formativo.
The aim of this study
was to compare the meaning given to good teacher by university professors and
students belonging to on-site and distance learning systems. A
non-probabilistic sample and the semantic network technique were used as data
collection instruments. Linear and nonlinear methods based on graph analysis
were used to analyze the information. Three generic categories of analysis were
elaborated for both systems. It was found that students and teachers of both
systems differed in terms of the hierarchy of the categories and their content.
Students value personal attributes above any other category, regardless of the
system; while teachers did differ in the meaning of the construct as a function
of the system. The need to design teaching strategies according to the
formative system is pointed out.
O objectivo
deste documento era comparar o significado dado ao bom professor por
professores universitários e estudantes pertencentes a sistemas de ensino
presencial e à distância. Uma amostra não probabilística e a técnica da rede
semântica foram utilizadas como instrumento de recolha de dados. Foram
utilizados métodos lineares e não lineares baseados na análise gráfica para
analisar a informação. Foram desenvolvidas três categorias genéricas de análise
para ambos os sistemas. Verificou-se que estudantes e professores em ambos os
sistemas diferiam em termos da hierarquia das categorias e do seu conteúdo. Os
estudantes valorizam os atributos pessoais acima de qualquer outra categoria,
independentemente do sistema; enquanto os professores diferiram no significado
da construção de acordo com o sistema. A necessidade de conceber estratégias de
ensino de acordo com o sistema formativo é apontada.
Palavras-chave: Bom professor;
Sistema de ensino presencial e à distância; Alunos; Professores; Bom professor
INTRODUCCIÓN
La
práctica docente se puede entender como una actividad que se centra en el
maestro e incluye comportamientos y relaciones entre profesores y estudiantes,
esto es, sus hábitos y acciones en los diversos contextos educativos (Martínez
et al., 2005). Dicha práctica es multidimensional y compleja por lo que buscar
criterios válidos y confiables para evaluarla, es una labor ardua (Loredo, 2021; Zabalza, 2012). Al respecto, se han diseñado diferentes maneras
de obtener información sobre las características de la buena práctica docente,
por ejemplo, a través de cuestionarios de autoevaluación (Ayzum, 2012; Calatayud, 2018; Martínez
et al., 2018; Rico, 2019), cuestionarios de opinión (Aguiar et al., 2018; Pedroza y Luna, 2017;
Romero y Martínez, 2017; Santos et al., 2017), evaluación por pares
(Aguiar et al., 2018; González et al.,
2020; Pedroza y Luna, 2017; Romero y Martínez, 2017; Santos et al., 2017),
o por medio de cuestionarios de autoinforme (Hickman et al., 2016; Loredo, 2021; Zabalza, 2012). A esto se le puede sumar las
modalidades específicas en que se concreta la función docente, ya sea en sistemas
presenciales o a distancia.
Zabalza
(2012) menciona que las prácticas docentes son contextualizadas, por lo que se
deben de analizar en función de los sistemas específicos en que estas se
ejercen. Por su parte, Mendoza (2020) sostiene que
la modalidad educativa (presencial o a distancia) tiene características propias
que impacta el proceso de enseñanza y aprendizaje del alumno, por lo que las
habilidades que debe tener un buen profesor variarán en algunos aspectos entre
los diferentes sistemas de formación.
En
la literatura hay diversos estudios acerca de las características que debe
tener un buen profesor en sistemas presenciales a partir de la opinión de los
estudiantes: estos hacen referencia a cualidades personales (relacionada a los
valores), actitudinales (aquellas que se surgen en la interacción profesor-estudiante)
y profesionales -cualidades que se relacionan con su preparación y ejercicio
profesional- (Alonso, 2019a; Cabalín y Navarro, 2008; Cruz et al., 2021; Gargallo et al.,
2010; Sayós et al., 2014); o bien a
aspectos de su metodología docente -características propias del profesor a la
hora de impartir sus clases- (Alonso, 2019a; Bossolasco y Chiecher, 2020;
Gargallo et al., 2010; Hickman et al., 2016);
claridad explicativa -es decir, que expone de manera segura y entendible los
temas- (Bossolasco
y Chiecher, 2020; Cruz et al., 2021; Gargallo
et al., 2010; Valerio y Rodríguez, 2017) y el ser didáctico -que
consta de un repertorio de estrategias para favorecer el aprendizaje- (Bossolasco y Chiecher, 2020;
Cruz et al., 2021; Valerio y Rodríguez, 2017).
Aunque
en general se considera que existen rasgos compartidos entre los buenos
profesores en los sistemas presenciales y a distancia, en estos últimos al ser
su labor prioritariamente mediada por las Tecnologías de la Información y la
Comunicación (TIC), los procesos de enseñanza-aprendizaje adquieren un matiz
diferente al presencial. Al respecto,
Dada
la multidimensionalidad de los elementos que integran
al constructo práctica docente, es que se le puede concebir como un sistema
complejo de relaciones (Becerra, 2014). De acuerdo
con Hilbert (s.f.) “un sistema [complejo está]
compuesto de agentes conectados, interdependientes, diversos y adaptativos (…)
cuyas interacciones resultan en fenómenos emergentes (…) no evidentes a partir
de la suma de las partes individuales”, cultural y contextualmente situados.
Este punto de vista posibilita tanto el análisis de la fuerza de las redes de
relaciones como los detalles del sistema como un todo.
Los
sistemas complejos se pueden considerar una red social, entendida como un conjunto
de agentes que se relacionan entre sí (Álvarez et al., 2013). De esta manera, las redes
sociales se constituyen en una alternativa novedosa para el análisis de los
aspectos subjetivos de los fenómenos que se estudian, y pueden ejemplificarse
visualmente mediante esquemas gráficos o grafos, ya que estos muestran los elementos
de un sistema o conjunto.
En
este caso, el significado de buen profesor en estos sistemas formativos
(presencial y a distancia) funciona como la representación del sistema social
complejo cuyos elementos interdependientes (nodos) se relacionan entre sí
(aristas), poniendo el acento en las relaciones y no solo en los atributos
particulares que conforman al constructo. En este contexto, la teoría de grafos
aporta una estructura visual accesible conformada por nodos y aristas que
representan a los atributos y sus relaciones, además de métricas para
comprenderlas (Kuz et al., 2016). Asimismo, evidencian la relevancia
cultural, es decir, la aplicación directa con la población de interés,
obteniendo así, información contextualizada y específica al fenómeno (Flores et al., 2020).
Debido
a la complejidad del constructo y la necesidad de
realizar análisis de tipo no lineal para comprenderlo a profundidad, se planteó
como objetivo comparar el significado percibido de “buen profesor” por docentes
y estudiantes en dos sistemas formativos de psicólogos --presencial
y a distancia--, representados como redes sociales compl
MÉTODO
Se
empleó un diseño no experimental transversal con un alcance descriptivo que
permite conocer y describir la variable de interés (Hernández
et al., 2014). Los participantes fueron estudiantes y profesores
activos de la carrera de psicología en una universidad pública mexicana, tanto
en modalidad presencial como a distancia. La población meta fue elegida a
través de una muestra no probabilística por invitación. Respecto al sistema
presencial, colaboraron 114 estudiantes y 19 de sus profesores durante el
semestre 2016-2. En cuanto al Sistema de Universidad Abierta y Educación a
Distancia (SUAyED) participaron 174 estudiantes y 17
profesores durante el semestre 2018-2. Su distribución por sexo y rol se
desglosa en la Tabla 1.
Tabla 1. Distribución
de participantes del estudio por Sistema educativo.
|
Sistema Presencial |
|
SUAyED |
||
|
Estudiantes |
Profesores |
|
Estudiantes |
Profesores |
Mujeres |
88 |
12 |
|
131 |
10 |
Hombres |
26 |
7 |
|
43 |
7 |
Total |
114 |
19 |
|
174 |
17 |
Nota: SUAyED (Sistema de Universidad Abierta y Educación a
Distancia).
Como
instrumento de recolección de datos se elaboraron dos preguntas basadas en el
procedimiento de redes semánticas naturales empleado por Figueroa
et al. (1981) que incluye la solicitud de datos sociodemográficos de
los participantes. Se indicaron las siguientes instrucciones: “Escribe todas
las palabras (sustantivos) que respondan a la pregunta ¿cuáles son las
características que describen a un buen profesor?”, respectivamente para cada
modalidad. Posteriormente, se les solicitó que jerarquizaran los sustantivos
previamente mencionados, en orden descendente, dando el lugar 1 a aquel que consideraran el más relevante. Se les mencionó que tenían un
máximo de 15 minutos para responder. En el caso del sistema presencial el
instrumento se desarrolló a lápiz y papel, mientras que para el SUAyED se desarrolló de manera digital a través de la
plataforma Moodle.
Por
medio de correo electrónico se invitó a participar a estudiantes y profesores
del SUAyED donde se especificaba el propósito y
proceso de la investigación. La evaluación se presentó en la plataforma Moodle institucional de la siguiente manera: en una primera
pantalla, se estipuló lo referente a los protocolos de consentimiento informado
y aviso de privacidad y confidencialidad de los datos apegados al Código Ético
del Psicólogo (Sociedad Mexicana de Psicología, 2010).
En una pantalla posterior, se presentaron las preguntas previamente descritas.
Las respuestas al cuestionario se exportaron de forma directa a una base de
datos en el programa Excel. El procedimiento para el sistema presencial fue
equivalente solo que éste se llevó a cabo en el aula. Para una descripción
extensa del procedimiento se sugiere consultar el trabajo de Hickman et al., (2016).
Con
los datos recabados se diseñaron bases de datos en el software Excel en las
cuales se capturaron las respuestas individuales, así como las variables
demográficas de rol, sexo, dedicación, generación, claustro y sistema de
formación. Con el fin de mantener el anonimato de los participantes, se les
otorgó un folio y se eliminaron aquellos datos de identificación no necesarios
para la investigación. Posteriormente se homogeneizaron los atributos
mencionados por los participantes para definir al “buen profesor”, es decir, se eliminaron aquellas palabras
escritas en plural y/o en femenino, se emplearon sinónimos y se obtuvieron las
frecuencias de emisión de cada una de ellas.
Por
último, para facilitar la interpretación y visualización del grafo se realizó
una poda con la finalidad de reducir nodos irrelevantes y de bajo peso (Arroyo et al., 2021; Miranda et al., 2014). Estas
bases permitieron la construcción de una matriz dinámica, principal insumo para
la elaboración de los grafos. Para ello se ocupó el programa de acceso libre Gephi en su versión 0.9.2. Se exportaron las matrices
dinámicas de Excel al programa Gephi con el fin de
elaborar los grafos de las redes semánticas. Las métricas analizadas (Kuz et al., 2016) se describen en la
Tabla 2.
Tabla 2. Métricas de análisis del grafo.
Nombre |
Descripción |
Número
total de nodos |
Frecuencia
de emisión de todas las palabras definidoras |
Número
total de aristas |
Cantidad
de relaciones existentes entre todos los elementos del grafo |
Modularidad |
Fuerza
de división de la red. Forma grupos o clústeres en la red, en función de las
relaciones entre los elementos |
RESULTADOS
Con
el propósito de analizar las relaciones que se establecieron entre los
atributos mencionados por los participantes de ambos sistemas formativos, se
aplicó el estadístico de modularidad a cada grafo (Tabla 2). Este análisis dio
como resultado la conformación de tres clústeres o categorías semánticas (Aguirre, 2011) integrados por los atributos de mayor
frecuencia mencionados por los participantes, y que guardaban entre sí
significados equivalentes. Los clústeres categoriales y su definición se
muestran en la Tabla 3. El análisis de estos permitió conocer la dinámica de
sus elementos y realizar inferencias sobre la lógica de su agrupación que se
describen más adelante.
Tabla 3. Clústeres categoriales y su definición.
Clúster categorial |
Definición |
Atributos
personales |
Rasgos
y atributos del profesor y que determinan su forma de ser. |
Metodología
docente |
Comportamientos
y habilidades del profesor que inciden directamente en el proceso de
enseñanza-aprendizaje. |
Actitud
hacia los estudiantes |
Comportamientos
habituales encaminados a la promoción de la motivación, generación de respeto
y trato igualitario entre y hacia el estudiantado. |
Por
otro lado, en las Tablas 4 y 5 se muestran las métricas no lineales de los
grafos. En estas se incluyeron solo las palabras con un valor de centralidad
cercano a 1, es decir, aquellos nodos que tienen el mayor nivel de proximidad
con respecto a los demás nodos de la red (Arroyo
et al., 2021); a su vez, este valor nos indica las palabras con mayor
porcentaje de mención por los participantes.
En
las tablas se puede observar el número de nodos que conforman cada clúster
categorial, donde a mayor número de nodos mayor variedad de palabras con significado
equivalente. Además, se puede observar el número de aristas entre dichos nodos
que representan la densidad de las relaciones, esto es, a mayor número de
aristas mayor densidad de la red. Con el propósito de facilitar la lectura y
análisis de datos, los resultados serán descritos en función de los sistemas
formativos –presencial y a distancia—y posteriormente se compararon entre
sujetos.
Sistema presencial
Para
el estudiantado (Tabla 4) el constructo “buen
profesor” está estrechamente relacionado con atributos individuales, ya que el
clúster categorial con mayor número de palabras semánticamente equivalentes y
alta densidad es el de Atributos personales compuesto por 16 nodos y 109
aristas, seguido por el de Actitud hacia los estudiantes (13 nodos y 66
aristas). Por su parte, Metodología docente fue el menos denso (58 aristas) y
con un número menor de nodos (12), pues se observa que las palabras relativas a
los comportamientos pedagógicos de un “buen profesor” fueron las
menos. Esto implica que para ellos las habilidades y competencias pedagógicas
no son centrales para definir al buen profesor.
Tabla 5. Estadísticos no lineales del Sistema de Universidad
Abierta y a Distancia (SUAyED)
|
Estudiantes SUAyED (N=174) |
|
Profesores SUAyED (N=17) |
||||
|
Clúster categorial |
|
Clúster categorial |
||||
Estadístico/ Categoría |
Atributos
personales |
Metodología docente |
Actitud hacia los
estudiantes |
|
Metodología docente |
Actitud hacia los
estudiantes |
Atributos
personales |
Nodos
(definidoras) |
24 |
21 |
7 |
|
8 |
6 |
4 |
Aristas
(relaciones entre definidoras) |
237 |
173 |
28 |
|
19 |
11 |
4 |
Nodos
que conforman cada categoría |
Empático Responsable Amable Paciente Dedicado Comprensivo Comprometido Tolerante Justo Claro Profesional |
Respetuoso Didáctico Conocimiento Comunicación Retroalimentador Puntual Domina
TIC Organizado Asertivo |
Flexible Humano Motivador Interés |
|
Habilidades
tecnológicas Comunicación Interés
alumnos Dedicado Vocación |
Comprometido Organizado Flexible |
Empático Paciente |
En
cuanto al profesorado, se encontraron cuatro clústeres donde el de mayor
densidad semántica fue el de Actitud hacia los estudiantes (14 nodos y 48
aristas), seguido por el de Metodología docente (11 nodos y 35 aristas);
mientras que los atributos personales se distribuyeron en dos clústeres de
menor densidad para definir a un “buen profesor” (7 nodos y 21 aristas para la
categoría a y 4 nodos y 6 aristas para la categoría b). Estos datos nos permiten
inferir que para los profesores las características vinculadas a
comportamientos y habilidades del profesor y los encaminados a la promoción de la
motivación, generación de respeto y trato igualitario entre y hacia el
estudiantado son las primordiales para caracterizar a un buen docente.
Sistema de Universidad Abierta y Educación a Distancia (SUAyED)
Para
los estudiantes (Tabla 4) el clúster categorial de mayor densidad fue el de Atributos
personales (24 nodos y 237 aristas), seguido de Metodología docente (21 nodos y
173 aristas), dando menor prioridad a la categoría Actitud hacia los
estudiantes (7 nodos y 28 aristas), lo que da a entender que aspectos como ser
flexible y ser motivador no son el aspecto central que define a un buen
profesor. Para los profesores Metodología docente es el clúster categorial más
importante para definir a un buen profesor (8 nodos y 19 aristas), seguido de Actitud
hacia los estudiantes (6 nodos y 11 aristas), dando menor prioridad a los Atributos
personales (4 nodos y 4 aristas), por lo que se puede suponer que los
profesores consideran más importante el contar con habilidades tecnológicas y
de comunicación, sobre el ser empático y paciente.
Se
puede observar que todos los grupos coinciden en los clústeres categoriales que
definen a un buen profesor, aunque existen diferencias en su jerarquía de
importancia y contenido. En el caso del sistema presencial, el orden entre
ambos grupos difiere totalmente, ya que los estudiantes dan mayor prioridad a
los atributos personales mientras que los profesores dejan esta categoría al
final, siendo lo más importante para ellos la actitud hacia los estudiantes, la
cual ocupa un segundo puesto para los estudiantes. Respecto al SUAyED, tampoco existe concordancia entre la jerarquía de
ambos grupos. Los estudiantes priorizan los atributos personales, mientras que
los profesores le dan menor importancia, dando prioridad a la metodología
docente, la cual los estudiantes colocan en segundo lugar.
Comparación entre estudiantes
Se
puede observar que los estudiantes de ambos sistemas formativos consideran más
importante el clúster categorial Atributos personales, el cual incluye
características como responsable, amable, tolerante y comprometido. Sin
embargo, la mayor parte de las palabras semánticamente equivalentes que
conforman este clúster cambian en cada sistema. Para los estudiantes
presenciales incluye las definidoras puntual y respetuoso,
mismas que no aparecen para los estudiantes del SUAyED
quienes destacan los términos empático y comprensivo como
características principales.
Comparación entre profesores
Los
profesores de ambos sistemas coinciden en dejar como último clúster categorial
el de Atributos personales dando prioridad a la Metodología docente, compuesto
por palabras como habilidades tecnológicas, comunicación, interés en sus
alumnos, domina temas y dedicado; y también a la categoría Actitud hacia los
estudiantes, incluyendo características como didáctico, formación, vocación,
constante y ejemplo a seguir. Por otro lado, en las Figuras 1, 2, 3 y 4 se
muestran los grafos de cada sistema. En el grafo de los estudiantes del sistema
presencial (Figura 1), se puede observar que el nodo forma de enseñar tiene una
gran relación con otras palabras que no son de su categoría, relacionándose con
nodos como responsable, respetuoso, amable y conocimientos. Asimismo,
comprensivo tiene un comportamiento similar, conectándose con definidoras como
responsable, puntual, estricto/exigente y capacidad explicativa.
Figura 1. Grafo
de estudiantes del sistema presencial. Los colores representan los clústeres
categoriales resultantes del estadístico de modularidad, donde: Verde=
metodología docente; naranja= actitud hacia los estudiantes y, morado=atributos
personales.
En
el caso de los profesores (Figura 2), comprometido y superación docente son las
palabras que se relacionan más con otros nodos de categorías ajenas, como
formación, puntual, conocimientos, amable y forma de enseñar.
Figura 2. Grafo
de profesores del sistema presencial. Los colores representan los clústeres
categoriales resultantes del estadístico de modularidad, donde: Verde=
metodología docente; naranja= actitud hacia los estudiantes; rosa= atributos
personales a y, azul= Atributos personales b.
Respecto
al grafo de los estudiantes del SUAyED (Figura 3),
las palabras flexible y respetuoso son las que tienen una gran interacción con
nodos de otras categorías, como lo son comprensivo, respetuoso, comunicación,
conocimiento y dedicado. En lo tocante a los profesores (Figura 4), las
definidoras flexible y paciente tuvieron dicho comportamiento, conectándose con
definidoras como empático, comunicación, habilidades tecnológicas y
responsable.
Figura 3. Grafo
de estudiantes del Sistema a distancia. Los colores representan los clústeres
categoriales resultantes del estadístico de modularidad donde: Verde= actitud
hacia los estudiantes; naranja= metodología docente y, morado= atributos
personales.
Figura 4. Grafo
de profesores del Sistema a distancia. Los colores representan los clústeres
categoriales resultantes del estadístico de modularidad donde: Verde= actitud
hacia los estudiantes; naranja= atributos personales y, morado= metodología
docente.
Discusión
El
objetivo del presente trabajo fue comparar el significado percibido de buen
profesor entre un sistema formativo presencial y uno a distancia, entre
estudiantes y profesores, empleando un análisis de grafos. Como resultado, se
encontró que parte de los hallazgos concuerdan con lo señalado por Mendoza
(2020) y Zabalza (2012) respecto al impacto de los
sistemas de enseñanza en el significado del constructo buen profesor. Pese a
haberse nombrado clústeres categoriales con el mismo referente, su contenido, y
por ende el significado, cambia entre sistemas y entre sujetos, debido a que las
palabras que las integran son, en algunos casos, morfológicamente diferentes.
Al
comparar entre sistemas, se encontró que los estudiantes otorgan mayor
prioridad a las características personales, independientemente del sistema
educativo, lo cual coincide con lo reportado por Alonso (2019ª, 2019b) y Sotelo
et al., (2017). A pesar de ello, el resto de los clústeres difieren en orden de
importancia. En el caso de los profesores se encontraron diferencias entre
sistemas, mientras los del sistema presencial dan prioridad a la actitud hacia
los estudiantes, los profesores del SUAyED priorizan
la metodología docente. Sin embargo, concuerdan en que la categoría menos
importante es la referente a los atributos personales. Esto coincide con lo
encontrado por Cabalín et al., (2010), Guzmán
(2011) y Hickman et al., (2016), quienes sostienen
que los profesores valoran más las características relacionadas con aspectos
metodológicos y cognitivos para definir a un buen profesor.
En
lo que concierne al sistema presencial y a distancia, se encontraron
diferencias en el significado otorgado por estudiantes y profesores. Mientras
los primeros dan prioridad a los atributos personales, los segundos priorizan
la actitud hacia los estudiantes. Esto difiere con lo reportado por Cabalín et al. (2010) donde se encontró que
los atributos actitudinales son más importantes para los estudiantes que para
los profesores, cuando se caracteriza a un buen docente.
En
el caso de los estudiantes de ambos sistemas, el clúster Atributos personales
se relaciona fuertemente con la Metodología docente, esto significa que si bien
un profesor puede tener las características esperadas como la responsabilidad o
el ser respetuoso, no es suficiente para decir que es un buen profesor, sino
que también es necesario cuente con características como la forma de enseñar y
tener conocimientos disciplinarios, evidenciando así la multidimensionalidad
y complejidad de la práctica docente (Loredo, 2021; Zabalza, 2012). En este sentido, un análisis
lineal de ella dificulta mostrar la interdependencia de las relaciones que se
establecen en estos sistemas complejos (Becerra, 2014; Hilbert, s.f.).
Por
otra parte, en el caso de los profesores se observa que existe una fuerte
relación entre los clústeres categoriales Actitud hacia los estudiantes y Metodología
docente, lo que significa que no basta con tener los conocimientos y
preparación para ser un buen profesor, sino que también es importante contar
con las habilidades necesarias para comunicar dichos conocimientos y motivar a
sus estudiantes. Sin embargo, el análisis entre clústeres categoriales (ver
figuras 1 a 4) permite observar la interacción entre los referentes que denotan
a un buen profesor, como es el caso del nodo forma de enseñar (en el caso de
los estudiantes presenciales), que si bien pertenece al clúster actitud hacia
los estudiantes, forma una equivalencia semántica con palabras como inteligente,
respetuoso, comprometido, amable y conocimientos, haciendo evidente que la
forma de enseñar se relaciona con los atributos personales y la metodología
docente.
En
cuanto a los estudiantes del SUAyED, ocurre algo
similar con la palabra flexible que se relaciona semánticamente con atributos
como respetuoso, responsable, comprensivo, didáctico y comunicación, esto es,
el ser flexible no solo se vincula con la actitud hacia los estudiantes, sino
también con los atributos personales y la metodología docente, evidenciando de
nueva cuenta la multidimensionalidad del constructo
“buen profesor”.
Para
los profesores de ambos sistemas de formación, también se encontraron relaciones
interclústeres. Por ejemplo, para el sistema
presencial, el atributo superación docente, tiene relaciones semánticas con
palabras de otros clústeres categoriales como comprometido, formación,
respetuoso y amable, dando cuenta de que para ser calificado como “buen
profesor” no basta con poseer solo características de un tipo, sino que éstas
se vinculen semánticamente entre sí.
En
el grafo de los profesores SUAyED la palabra
comunicación cumple con un papel similar, conectándose con nodos como paciente,
empático, flexible, comprometido y organizado. Los estudiantes consideran que
ser responsable, respetuoso, amable, empático y comprensivo son las
características más importantes que debe tener un buen profesor,
independientemente del sistema educativo en el que se desarrollen. Por su
parte, los profesores priorizan características como ser comprometido, empático
y tener vocación para realizar un ejercicio adecuado de su profesión. En el
caso del sistema presencial, los resultados coinciden con lo reportado por Alonso (2019b), Bossolasco y Cheicher
(2020), Cabalín y Navarro (2008), Cruz et al., (2021),
Gargallo et al., (2010), Hickman et al., (2016) y
Sayos et al., (2014), quienes mencionan que las características mejor
valoradas por parte de los estudiantes son las cualidades personales,
actitudinales, profesionales y metodología docente, siendo un común en la
mayoría de los trabajos a nivel universitario.
Sin
embargo, en el presente estudio no aparecieron otras características que
resultaron sumamente importantes en otros trabajos, como la claridad
explicativa, el ser didáctico (Bossolasco y Cheicher, 2020;
Cruz et al., 2021; Gargallo et al., 2010; Valerio y Rodríguez, 2017), el
uso de técnicas de aprendizaje activo o tomar en cuenta los distintos estilos
de aprendizaje de los alumnos (Bagriacik y Banyard, 2020).
Es probable que dichas diferencias se deban la diversidad de poblaciones
empleadas, ya que se extienden a otras carreras y países, y como se mencionó
con anterioridad, las redes semánticas naturales cuentan con relevancia
cultural y son sensibles al contexto de los participantes.
En
cuanto al SUAyED, se esperaba encontrar resultados
similares a los de Ávila y López (2020), Durán y Estay
(2016), García (2020) y Massuga et al. (2021) quienes rescatan que las
características más importantes en un buen profesor a distancia incluyen la
planificación y diseño de actividades, ser motivador, experto en contenidos,
acompañante en el aprendizaje, tener disposición y tener una buena
comunicación. Dichas características sí aparecieron en los resultados del
presente trabajo, tanto en el caso de estudiantes como de profesores, pero no
tuvieron una alta relevancia para formar un clúster categorial independiente,
siendo los atributos personales y la metodología docente los más importantes al
momento de definir a un buen profesor a distancia. Esto se puede deber a que
los participantes obvien esas características y las consideren una parte
inherente del buen profesor, y no como algo de lo que se pueda prescindir.
Asimismo,
se encontró algo similar al trabajo de Bossolasco y Chiecher (2015)
quienes reportan que los profesores dan mayor importancia a habilidades
como la retroalimentación, comunicación, apertura a sugerencias y creación de
ambientes de aprendizaje sobre las habilidades tecnológicas, ya que si bien,
fue una característica con mucha frecuencia de aparición, no llega a
convertirse en una categoría por las relaciones que tiene, cumpliendo un papel
de intermediario entre otras características como la comunicación, interés por
los alumnos, empatía, motivador, etc. Sobre esta misma idea, los estudiantes no
priorizan a las habilidades tecnológicas, lo cual se puede atribuir a que relevan
a los atributos actitudinales y personales del profesor (Sotelo
et al., 2017).
Los
hallazgos reportados en el presente trabajo ayudan a ampliar el conocimiento
sobre el significado del constructo buen profesor en los sistemas de educación
presencial y a distancia, lo que resulta de interés al momento de hablar de la
evaluación de la práctica docente, ya que codyuvaría
a mejorar la calidad de la enseñanza al señalar las características que se
consideran importantes para definir a un buen profesor. Adicionalmente se
promovería la evaluación formativa a través de mecanismos de retroalimentación
precisa y puntual de las habilidades y competencias de los comportamientos de
un docente efectivo. Por último, evidencia la importancia de entender los
elementos contextuales como imprescindibles para un buen entendimiento del buen
desempeño docente, sin hacer de lado las características necesarias y
suficientes para ser considerado buen profesor.
Por
otra parte, este trabajo amplía los estudios realizados desde los enfoques de
redes sociales complejas, mostrando un análisis distinto que puede ser aplicado
a otros casos de índole educativa. Este trabajo adquiere relevancia por el
contexto emergente de la contingencia por la COVID-19, debido a que los
profesores se vieron obligados a adaptar sus prácticas docentes de un sistema
presencial a uno a distancia, lo que hace de vital importancia conocer las
características más importantes que se deben adquirir para lograr una educación
de calidad a través de un sistema a distancia.
CONCLUSIONES
El
aporte fundamental del trabajo radica en ampliar la información existente en
cuanto al significado de buen profesor en sistemas presenciales y a distancia.
Se destaca que existen diferencias en el significado otorgado por profesores y
estudiantes, así como entre sistemas de formación. Los resultados obtenidos
abren la posibilidad de formular un perfil del buen profesor en sistemas a
distancia, para realizar evaluaciones y capacitaciones alrededor de aquellas
habilidades y competencias relevantes para el docente y su práctica. En cuanto
a las fortalezas del presente estudio se encuentra el uso de análisis lineales
como no lineales a partir de redes sociales complejas, lo que permite conocer
no solo la frecuencia de aparición de una palabra, sino también conocer las relaciones
que tiene con otras.
Para
futuras investigaciones se sugiere que se indague en otras poblaciones, como
escuelas privadas, otras carreras, distintos niveles educativos, etc. Asimismo,
se recomienda analizar otras variables de interés al momento de realizar
comparaciones. También es recomendable investigar en otras zonas geográficas,
para comparar en función del contexto. Adicionalmente, se sugiere el uso de
análisis relacionales para tener resultados más extensos y con relevancia
cultural, permitiendo observar las características, relaciones y valoraciones
que tienen los participantes sobre el objeto de investigación.
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CONFLICTO DE INTERESES. Los autores declaran que no existe conflicto de intereses
para la publicación del presente artículo científico.